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Second Life: reinyectar energía a Melilla con baterías eléctricas

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Utilizar neumáticos viejos para producir calzado, convertir el agua residual en fertilizante y realizar ropa con residuos del mar son algunas de las numerosas innovaciones que surgen de las iniciativas de la economía circular. Para alcanzar el anhelado desarrollo sostenible, cada vez más empresas están adoptando modelos de economía circular. A través de estos métodos, las empresas reducen el uso de material, rediseñan los productos para que consuman menos recursos, extienden la vida útil de bienes y productos y aprovechan los residuos convirtiéndolos en recurso para la fabricación industrial.

Ahora bien, pensando a una escala mayor, imagínate que pudieras proporcionar energía a ciudades enteras con materiales reciclados. Puede parecer una utopía, pero en Enel estamos dando una segunda vida a las baterías con nuestro último proyecto.

En su esfuerzo por mejorar la estabilidad de la red con la energía almacenada en baterías usadas de vehículos eléctricos Nissan, Enel ha puesto en marcha su nuevo proyecto: Second Life.

 

Un proyecto pionero

La colaboración y la Open innovation son esenciales para el éxito. El proyecto Second Life fue creado e implementado gracias a la sinergia de la casa automovilística Nissan y Loccioni, una empresa italiana que fabrica sistemas de almacenamiento e integradores. La solución realizada por EGP en colaboración con Nissan consiste en utilizar 30 baterías nuevas y 48 baterías usadas de vehículos eléctricos, conectarlas entre sí y proporcionar una carga total disponible de hasta 4 MW, con una energía máxima acumulada de 1.7 MWh. El proyecto ha sido implementado en una central eléctrica convencional de Melilla, España, que pertenece a Endesa, la filial Española de Enel.

Pablo Fontela Martinez, Innovation Project Manager de Endesa, explicó que “ahora que el sistema está funcionando a nivel comercial, seguiremos controlando cómo se comportan las baterías”. Gracias a los datos obtenidos, más líneas de negocio del Grupo podrán aprovechar las baterías usadas de vehículos eléctricos para apoyar la transición energética.

“Hemos creído firmemente en este proyecto desde el primer día”, declara Ernesto Ciorra, Chief Innovability® Officer, “Contamos con importantes socios, que confían en la incesante dedicación de nuestros colegas y en una central real que funcione, donde podamos implementar soluciones de almacenamiento otorgando una segunda vida a las baterías”.

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¿Cómo funciona? Second Life nació de una idea sencilla: una vez que las baterías han finalizado su vida útil en vehículos eléctricos, se pueden extraer y montar en sistemas de almacenamiento estacionario. Para evitar los eventos de desbordamiento de carga, mejorar la fiabilidad de la red y garantizar la continuidad del servicio de red para la población local, estos sistemas de almacenamiento están integrados en una central eléctrica. Además de contribuir a la economía circular, el proyecto añade un componente innovador, ya que no es necesario desmontar las celdas de la batería para desplegarlo, por lo que mejora la seguridad y reduce el coste.

Tal y como mencionó Salvatore Bernabei, CEO de Enel Green Power, “el desarrollo de tecnología de almacenamiento es clave si queremos fomentar una mayor penetración de las renovables en nuestros sistemas energéticos, de esta manera podemos configurar realmente la generación de energía del futuro”.

El éxito que se esconde detrás de la segunda vida

“En Nissan creemos que el futuro pasa por la electrificación y con esta colaboración podemos conseguir un futuro más inteligente y eficiente” afirmó Soufiane El Khomri, Energy Business Unit Director de Nissan. Sus palabras fueron repetidas por Matteo Marchetti, Project Manager de Loccioni, que declaró, “el reto del proyecto Second Life nos dio la oportunidad de sumar nuestra experiencia en la acumulación de energía y poner a prueba los componentes de coches”.

Second Life ya ha recibido un gran reconocimiento gracias a su impacto. En 2020, el proyecto recibió el premio a la Mejor Práctica de Economía Circular del BASF – Sustainability Excellence Club (Club de Excelencia En Sostenibilidad), por la categoría de empresa grande.

Por su capacidad de influir positivamente en las vidas de los 90.000 habitantes de Melilla, Second Life nos permite crear valor sostenible para la población y también mejorar la fiabilidad de toda la red eléctrica.


Apostar por un futuro circular

Second Life es un gran logro para Enel. Como expresó Ciorra, “lo que habría parecido imposible hace solo unos cuantos años, ahora es posible, se ha hecho realidad”. Gracias a proyectos como éste, Enel está consiguiendo que su metodología de innovación camine pareja al progreso sostenible, para transformar el mundo e impulsar la economía circular en la industria energética.